Vive con pasión

Vive con pasión

Vive con pasión

Ayer volví a ver la inolvidable película En busca de la felicidad. Es probable que la hayas visto y tal vez la recuerdes, Querid@ Lector@, porque al menos para mí es una película inusual. Está basada en la autobiografía de Cris Gardner y, mientras que muchas historias que se ven actualmente en la pantalla se presentan como «basada en hechos reales», esta historia realmente sucedió. Es más, no solo sucedió sino que aún continúa, y su protagonista está bien, vivo, trabajando, y puede ser un modelo a seguir para todos nosotros.

Para aquellos que no recuerden la película, voy a explicar que el protagonista, Cris Gardner, brillantemente interpretado por Will Smith, es un padre afroamericano solitario que, como resultado de diversas situaciones, se encuentra en la calle. Pero a pesar de ello, nunca deja de ser un padre amoroso y dedicado que educa conscientemente a su hijo y nunca abandona sus sueños de lograr su propósito en la vida. Aunque no tiene ni un centavo, no duda de sí mismo ni de sus habilidades, no pierde de vista ni por un momento su objetivo, y mantiene la fe en su futuro éxito con extraordinaria diligencia y dedicación. Con tal conjunto de características y compromiso, de alguna manera está «condenado» al éxito, porque no hay nada ni nadie capaz de detenerlo en su camino. A esto hay que añadir que vive sin buscar culpables de su situación, sin malgastar energías en culpar a su familia, a la situación, a la esposa que lo abandona, o a un país hostil a los negros.

Vive dedicado a su objetivo, y ese objetivo es la felicidad; alcanzar la felicidad, sea la que sea. Vive la vida en plenitud, aunque esa vida suya es extremadamente difícil y exigente.

Vale la pena volver a este personaje, a la película o al libro. Especialmente ahora, cuando a muchos nos parece que vivimos en una situación sin salida, no solo por una epidemia agrandada al límite, sino también por la anticipación de algún cataclismo económico, sumado a la vacunación masiva y obligatoria con una vacuna que aún no existe, pero sobre la cual parece que todo el mundo ya lo sabe todo, vendiendo, comprando, ganando y gastando dinero en ello. Querido Amiga y Amigo, ¿no tienes a veces la impresión de que los medios de comunicación y las redes sociales nos ofrecen una visión como la de Matrix que nada tiene que ver con la realidad? ¿Que nuestra vida real está completamente separada de este alboroto y sensacionalismo malsano?

Si es así, te invito a volver a la vida real, a tu propia vida, a tus metas, deseos y expectativas.

Y un buen comienzo para ese regreso será tomar conciencia de las pasiones, sueños y deseos que llevas dentro. ¿Qué te hace feliz? ¿Qué te preocupa? ¿Qué te enfada? ¿A qué dedicas tu tiempo libre? Cuando estás a solas contigo mismo, tú solo frente al espejo, ¿de qué te estás hablando? ¿Cuáles son tus conversaciones con tus seres queridos? ¿Con los amigos?

ES UN GRAN SECRETO DE NUESTRA EXISTENCIA HUMANA QUE PARA VIVIR NECESITAMOS PASIÓN. Cuando hablamos de pasiones a menudo pensamos en ellas como en algo destructivo; un gran amor ciego, algún odio que lo destruye todo, ira o fanatismo… Sí, eso también pasa, pero la pasión es necesaria para nuestra vida diaria, para emprender los deberes y tareas cotidianas. Ya veo esa sonrisa de incredulidad en tu rostro y la pregunta: «Ajá, me pregunto por qué necesito una pasión para hacer el desayuno a los niños o cuando voy de compras». Amigo, lo repetiré de nuevo: PARA TODO ESO SE NECESITA PASIÓN, Y AÚN MÁS PARA ESTABLECER FINES MAYORES.

Si durante mucho tiempo te has conformado con esa grisura cotidiana, con lo de siempre y, como decimos a veces, con esa «santa paz», muy a menudo y con mucha facilidad eso se transforma en mediocridad. Y la mediocridad se vuelve gris, y rutina y aburrimiento se arrastran lentamente. El aburrimiento se convierte en desánimo, en falta de voluntad para emprender nuevas tareas, e incluso para continuar las antiguas… Por eso tantos médicos, maestros, funcionarios, curas, esposas, esposos y padres maravillosos se convierten en personas amargadas, aburridas, constantemente irritadas y desanimadas.

Tal vez lo conoces por tu propia vida. Mira este aspecto de tu existencia. ¿Cuándo empezó a agobiarte e irritarte todo? ¿No fue cuando se agotó la inspiración en tu vida? La pasión, el deseo de crear y de darle sentido a cada día es lo que te permite seguir, lo que te da coraje y fuerza, y lo que los multiplica. Añade a tu vida diaria algo de ti mismo, sonrisa, compromiso, amabilidad, desinterés, gratitud… Haz las cosas ordinarias de una manera diferente. Eso hace que una persona sea creativa.

Vive con pasiónPASIÓN, LA VERDADERA PASIÓN ES LA FUERZA IMPULSORA. EL DESEO DE OFRECER ALGO DE UNO MISMO, LA GENEROSIDAD DEL CORAZÓN Y EL AMOR SON «APÉNDICES» QUE HACEN QUE TODO TENGA SENTIDO. Estoy escribiendo sobre la vida cotidiana, pero hay horizontes más amplios aún. Búscalos, no te dejes encerrar en un minúsculo círculo de asuntos cotidianos.

Como siempre, te pediré que hagas un poco de silencio y espacio en ti mismo. Permítete ese lujo. Como dice el eslogan publicitario: «porque tú lo vales». Escucha el silencio de tu interior, baja a tu corazón, pregúntale ¿qué desea?, ¿por qué quiere ofrecerse?, ¿qué idea, qué personas o asuntos le importan? En el fondo todos queremos grandes cosas porque para eso hemos sido llamados. Si no lo hacemos, de alguna manera nos empequeñecemos y nos volvemos grises e infelices. ¿Las grandes metas requieren esfuerzo? Por supuesto que sí, pero nos permiten vivir en plenitud; solo ellas nos permiten saborear la verdadera felicidad y la sensación de que estamos participando de algo mayor, que nuestra vida tiene un sentido profundo e importancia también para los demás. Necesitamos participar de algo que nos supera, que está más allá de nosotros, que nos obliga a salir. 

Una nota importante aquí: suceden grandes cosas en todos los lugares y momentos. Para una madre será un gran asunto educar a sus hijos, para un educador sus alumnos, para un emprendedor poner su empresa en pie, para un marido o mujer cuidar del matrimonio…, ¿Y PARA TI? 

¿Cuál es gran reto que requiere pasión para ti? ¿Qué quiere tu corazón? ¿De qué te has olvidado? ¿A qué quieres volver o qué quieres empezar?

Vive sabiendo que tu vida afecta al destino del mundo. El efecto mariposa no está reservado para algunas pocas míticas «mariposas». ESTA MARIPOSA ERES TÚ.

2 Comments
  • Chelsie Macer
    Posted at 03:36h, 08 diciembre

    i love this flawless post

  • Teresa Martín
    Posted at 15:26h, 14 enero

    Qué bien viene recordar la grandeza de cada día si lo vivimos con pasión, como algo especial, pues lo es. Y lo olvidamos con frecuencia.